EL HELICÓPTERO NO TRIPULADO QUE TODO LO VE

La empresa Tekplus Aerospace, con sede en Vigo (Pontevedra) y de capital 100% gallego, ha ideado, diseñado y fabricado un helicóptero no tripulado de tres metros de largo y con un peso máximo al despegue de aproximadamente 80 kilogramos. Este artefacto está orientado principalmente a las funciones de vigilancia, tanto en el segmento de defensa como en el sector civil.

EL PRESIDENTE DE TEKPLUS AEROSPACE,

Marcos Carrera, apunta que entre las misiones de este sistema aéreo de ala rotatoria, bautizado con el nombre de ‘Centauro’, se encuentran la detección de incendios forestales, las aplicaciones para el control del contrabando y los usos en el sector de la agricultura, como la dispersión de productos químicos.

El vehículo aéreo está equipado con cámaras giroestabilizadas que transmiten imagen normal e infrarroja de forma simultánea y en tiempo real. El sistema cuenta con una autonomía de entre cuatro y seis horas (en función de la carga de combustible o de los sensores que incorpore) y alcanza un techo máximo de 3.500 metros.

Entre las principales ventajas del sistema, presentado en Brasil en la primavera de 2011, se encuentran el fácil manejo de la aeronave y sus sencillos requisitos de mantenimiento. Pero uno de sus puntos más fuertes reside en el hecho de que las horas de vuelo del ‘Centauro’ son muy eficaces en términos de coste y, en consecuencia, altamente competitivas en el mercado internacional.

Para el desarrollo del proyecto fueron claves las líneas de ayuda de los organismos públicos, tanto de la Xunta de Galicia (a través de un crédito participativo de 850.000 euros de XesGalicia) como del gobierno del Estado, que subvencionó la iniciativa mediante el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) con 1,33 millones de euros procedentes del Fondo Tecnológico Europeo. Cabe destacar también que el ‘Centauro’ está considerado por el Ministerio de Ciencia e Innovación como un proyecto estratégico aeronáutico.

La innovación es absolutamente fundamental y es claramente nuestra apuesta, porque la empresa que innova en época de crisis recuperará seguro la inversión en los momentos de esplendor económico”. Marcos Carrera

SINERGIAS ENTRE EMPRESAS GALLEGAS

El caso de Tekplus Aerospace constituye un buen ejemplo de cómo la tecnología puntera puede adquirir valor añadido aprovechando la experiencia y el conocimiento de su entorno más próximo: cuentan con la colaboración de empresas del sector mecánico vigués para la fabricación de los vehículos aéreos no tripulados, lo que por ejemplo les permite aprovechar el apreciado know how de sus soldadores de titanio. Carrera señala que “nosotros aportamos la ingeniería y el conocimiento, pero los aplicamos con la gran experiencia del sector metal-mecánico de nuestro entorno”. En ese sentido, el presidente de la compañía destaca que en torno a un 90% del producto está hecho en Galicia, quedando solo al margen de la comunidad ciertos componentes como el sistema de navegación del vehículo aéreo. La satisfacción con la experiencia los lleva a colaborar en la actualidad con empresas gallegas del sector naval y automovilístico para vender sistemas completos de vigilancia integral.

A lo largo de 2012 iniciarán la comercialización del helicóptero en el que llevan trabajando desde que en 2008 abrieron su área de I+D+i al desarrollo de proyectos para sistemas no tripulados. En 2011 ultiman su adaptación y hacen los últimos retoques, mientras anotan ya intenciones de compra de diversas organizaciones llenando un calendario que garantiza carga de trabajo hasta finales de 2012.

Al margen del ‘Centauro’, la empresa gallega también presta servicios de ingeniería, diseño y cálculo de aeroestructuras para el sector de la aeronáutica. De hecho, son proveedores de nivel 2 para constructoras de aviones como Airbus y también trabajan para uno de sus principales rivales, Boeing. La línea de aeroestructuras de Tekplus Aerospace incrementó su facturación anual en un 40%, al tiempo que generó 45 puestos de trabajo. Carrera cree que lo que explica que la factoría gallega lograra colaborar con los Airbus A320, A350, A380, A330MRTT y A400M es una “muy buena selección de recursos humanos e ingenieros, así como un ahorro significativo en el desarrollo de los proyectos, que resultan muy competitivos y próximos al cliente,” explica.

La empresa surgió en 2005 orientada al sector aeroespacial y también al automovilístico. En la línea de automoción, desarrollaron cascos de moto que incluso están patentados, en colaboración con la Universidad de Vigo y con organismos como el Centro Tecnológico AIMEN. Además, colaboran en diversos proyectos con el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA). En la actualidad pertenecen también al clúster para la Tecnología Española de Defensa, Aeronáutica y Espacio (TEDAE). Tekplus Aerospace cuenta con tres sedes en territorio nacional (O Porriño, Madrid y Sevilla) y con una filial en la India, creada con el objetivo de minimizar costes.

Muestra de la importancia que le otorga la empresa a la innovación es que cuenta con un departamento específico de I+D+i formado por 15 personas con perfiles profesionales muy variados. Los 2 millones de euros anuales de inversión en innovación también dejan bien a las claras su compromiso con la puesta en valor en el mercado de nuevas ideas. De hecho, Tekplus invirtió en I+D+i casi el doble de lo que facturó durante el año 2010. Marcos Carrera destaca que la innovación es “intrínseca a nuestra empresa”, al tiempo que afirma que la incorporaron en todos los procesos, desde los de calidad hasta los de selección de personal. De hecho, ya están trabajando en otras versiones del ‘Centauro’ con diferentes diámetros de rotor y pesos máximos al despegue de hasta 200 kilogramos, lo que supone un nuevo peldaño en la innovación continua de Tekplus.